“Dicen que mi tía me empujó”: el testimonio de Brian, único sobreviviente de la tragedia de Gaira
El menor narró lo poco que recuerda de aquella noche, en la que su tía y otras cinco personas perdieron la vida.
Casi un mes después de la tragedia ocurrida el pasado 13 de septiembre, el joven Brian José Áñez Faneite dio su primer testimonio público sobre lo ocurrido aquella fatídica madrugada, en la que una camioneta conducida por el empresario Enrique Vives Caballero atropelló a siete personas, incluyéndolo a él, único sobreviviente de la tragedia.
En declaraciones a Noticias RCN, el joven, aunque no recuerda prácticamente nada de lo ocurrido, sabe que su tía, que era una persona muy cercana para él, fue quien le salvó la vida: “dicen que mi tía me empujó”, narra el joven pausadamente.
Aquella madrugada en la que murieron Rafaela (tía de Brian), Camila, Juan Diego, Elenoir, Laura y María Camila, Brian recuerda que acababan de salir de celebrar su fiesta de cumpleaños número 13 y se dirigían hacia otra fiesta.
“Íbamos de mi fiesta, para otra fiesta, de un amigo. Iban seis conmigo, mi tía, una amiga, dos pelaitas más y dos pelaitos, veníamos jodiendo, disfrutando, venían hablando y la vaina. Uno jugaba conmigo”, contó el joven al medio de noticias nacional.
De lo poco que recuerda Brian, agregó que “veníamos caminando para salir a la vía y no me acuerdo más”.
El joven, quien logró sobrevivir tras varios días internado en una unidad de cuidados intensivos, dice que "me siento un poco mareado todavía”, aunque en la clínica donde se recuperó lo graduaron de “héroe”, con un diploma que le entregó el personal médico por haber vencido a la muerte.
A su lado, sus papás también reflexionan sobre esta tragedia, que tuvo una mezcla entre dolor y esperanza. Y es que Liliana, madre de Brian, perdió a su hermana, pero al tiempo, gracias a ella, logró tener con vida a su hijo.
La misma madrugada en que Liliana se enteró de lo sucedido, quedó en shock y es muy poco lo que recuerda después de que le contaron que su hermana había fallecido y que su hijo iba en estado de gravedad hacia una clínica.
Por su parte, Carlos, padre del menor sobreviviente, dice “no ser quién para juzgar (a Enrique Vives Caballero)” y asegura que deja todo en manos de Dios y de las autoridades.